Desviándose del Camino hacia la Paz
Hace bastantes años que la Asamblea General de la ONU no ha generado este tipo de expectación. Creo que ni siquiera la última película de Harry Potter lo ha hecho. Si se tratara de un espectáculo probablemente habría colas de gente esperando noche y día para comprar las entradas. Sin embargo, la comparación con una película estilo Harry Potter tiene otros dos puntos importantes y coincidentes:
- igual que cuando ves una película basada en un libro que ya has leído, también en este caso sabemos muy bien cómo va a terminar.
- a diferencia del 7º capítulo de la 2ª parte de Harry Potter, éste de ninguna manera va a ser el final de la saga. Lamentablemente. Aunque podría serlo.
Los palestinos presentarán el reconocimiento de su estado a la votación de la ONU. Y aunque todavía no sabemos el camino exacto de esta iniciativa, países, políticos, periodistas y activistas ya se están posicionando y agrupando en uno u otro lado de la iniciativa.
Se escribe mucho, y se habla más, acerca de esta noticia, sin embargo, también se olvida mucho sobre todo este asunto que ni representa una novedad, y mucho más importante, tampoco representa un cambio ni un paso hacia una solución pacífica para el conflicto.
Antes de nada quiero aclarar una cosa, apoyo la creación de un Estado palestino. No solamente como una persona con nombre y apellidos sino también como Portavoz de esta Embajada y representante del Estado de Israel. Pero antes de que vayáis a celebrarlo como una gran noticia, os diré que no se trata de una gran novedad, porque Israel ya reconoció el Estado palestino (más o menos con las mismas características que su liderazgo presenta hoy) en tres ocasiones diferentes en el pasado.
La primera, en 1947 con la Resolución 181 de las Naciones Unidas que hablaba de la Partición y la Creación de dos Estados, uno judío y uno árabe. Nosotros la aceptamos, ellos nos declararon la guerra.
En los años 2000 y 2008 llegamos con los palestinos a un Acuerdo de Paz y, en ambas ocasiones se trataba de la creación de un Estado palestino reconocido por Israel. A ambos acuerdos llegamos tras una larga negociación con un objetivo muy claro, llegar a una solución pacífica del conflicto que, entre otras cosas, consistía en la creación de un Estado palestino. Pero en ambas ocasiones la respuesta palestina fue “no” (en el año 2000 parte de la respuesta fue la segunda Intifada).
Israel apoya la solución de “dos estados para los dos pueblos” como la única y mejor manera de llegar a la Paz. Creemos que el camino debe ser a través de las negociaciones directas entre los palestinos y nosotros.
La iniciativa palestina actual es pues un intento de evitar las negociaciones, y por eso creemos que sólo dañará la posibilidad de llegar a una solución pacífica. Desviarse del Camino de la Paz sólo nos conducirá hacia un retraso en la consecución de la Paz.
Lior Haiat
Portavoz de la Embajada de Israel